Comienza el día
Entramos en tren hasta la puerta de la clase. En las perchas tenemos que dejar nuestras chaquetas. Domingo se ha tirado al suelo, se le acerca un niño. “Por favor, levántate, yo te ayudo a quitarte la chaqueta.” Conseguimos colgar todos la ropa y entramos en el aula. Hacemos el corro, la asamblea. El maquinista nos saluda cantando: “qué alegría de volver a vernos, bienvenidos seamos todos”. Mientras el maquinista hace el recuento de niños, coloca la fecha…, sabemos que debemos estar callados para poder escucharlo; es una de las normas de la asamblea decidida por todos…
Contingut només disponible per a subscriptors
Accedeix a aquest article individual per només
3€ IVA incluido
Descobreix tot el nostre contingut sense límits
Ja tens compte? Inicia sessió