Introducción
Las actuales teorías sobre el proceso enseñanza-aprendizaje conducen a clasificar los diversos objetivos del trabajo de laboratorio en tres categorías fundamentales: la adquisición de habilidades prácticas, la vivencia de fenómenos y la resolución de problemas (Woolnough y Allsop, 1985). La primera de estas categorías hace referencia a contenidos procedimentales, la segunda a contenidos conceptuales, mientras que la tercera implica ambos tipos de contenidos además de otros actitudinales.
Si bien es posible pensar en trabajos prácticos “mixtos” que permitan la consecuci…