Mientras que desde la racionalidad técnica se ha venido considerando al profesor como un ser estático y reproductor del conocimiento de otros “expertos” alejados de la realidad del aula, surge, como alternativa, una filosofía de la racionalidad práctica vinculada a la interpretación, a la toma de decisiones, a la emisión de juicios, etc., cuyo objeto es llegar a comprender y mejorar los procesos de clase y los currículos formativos del profesorado.
Actualmente, cuando se está debatiendo sobre los cambios y perspectivas de la nueva Ley de Calidad, se considera imprescindible la aparic…