El juego es un elemento básico en la formación y en la vida de los niños y las niñas. Si un niño no juega, una de dos: o está enfermo o tiene algún problema importante. Puesto que es una necesidad vital tanto a nivel individual como de relación, la vida infantil no puede entenderse sin el juego, porque constituye un elemento esencial en su desarrollo, ya que le permite explorar el mundo de los mayores tanto con los juegos de imitación de oficios como con los de normas.
Los juegos tradicionales tienen la misión de estimular la capacidad de jugar de los niños y las niñas. Además d…