Los alumnos y las alumnas cada vez más nos piden experiencias fuera de sus ámbitos habituales, escuela y entorno urbano. Los campamentos de verano, las aulas de naturaleza y las granjas-escuela sólo son una respuesta parcial a la necesidad de entrar en contacto con el elemento natural. Andar, pasear, en definitiva, dar un paso tras otro, se ha convertido en un ejercicio físico en parte olvidado, sin tener en cuenta su importancia en la mejora de los problemas de salud (hipertensión, sistema cardiovascular, obesidad…), como favorecedor de la relajación (antiestrés, velocidad de reac…