La inmensa mayoría de la actividad docente se ha realizado hasta el momento en el formato de lección magistral, el método tradicional por excelencia, muy estimado por su aparente simplicidad y economía. La lección magistral tiene indudables ventajas pero supone un método extremadamente pasivo de transmisión de la información que convierte a los estudiantes en meros escribas que transcriben de forma ácrita todo lo que dice el profesor (Bernard, 1998; Pérez y colaboradores, 2000).
statu quo
Siguiendo las conclusiones de Delgado (1999) la formación del profesorado es un proceso sistem…