La invitación a escribir este artículo me parece un lujo que la casualidad, el atrevimiento y la lucidez de intuir que lo que sé, sin pretender que sea universal, tiene la fuerza de haber sido vivido.
Quiero empezar así, porque lo que escriba aquí es producto de una reflexión-acción con un grupo de profesores en una zona rural de Madrid Oeste, donde tradicionalmente desde hace muchos años se concentraba un gran número de inmigrantes, la mayoría de ellos de origen marroquí y otro gran porcentaje de portugueses.
Si tuviera que definir con una frase esta experiencia, diría: “La inmi…
