Concebir la ciencia como algo que un público interesado -pero no científico- puede entender fue un asunto que se extendió por Europa a lo largo del siglo XIX y principios del siglo XX. La Royal Institution en Londres o el Palais de la Decouverte en París son exponentes destacados de presentaciones científicas espectaculares que han llegado hasta nuestros días.
Estas actividades también pueden ser útiles para la enseñanza de las ciencias y, en particular, de la física, tan en retroceso en la actualidad en cuanto al número de vocaciones. Las presentaciones espectaculares no sólo pu…