La identidad no puede comprenderse más que en una dialéctica de identificación con el objeto primario, la madre, como objeto de placer y de deseo para el niño.
La identidad supone una búsqueda constante de sí mismo, que es el resultado de un proceso de separación del objeto-madre; es decir, separación de sus representaciones comunes y de sus afectos comunes.
¿Cómo se realiza este proceso? ¿Se realiza siempre? ¿No quedamos más o menos ligados al objeto primario y dependientes de éste? ¿No hay períodos en el desarrollo psicológico donde la identidad se encuentra más frágil? (…