Después de la fase de actividad constructiva, a veces se propone a los niños y las niñas que dibujen lo que han hecho. Estos dibujos ponen de manifiesto algunas dimensiones de lo que pensaba el niño o la niña mientras construía y sirven para que el propio niño o la propia niña reinterprete lo que ha conseguido hacer.
Y, sobre todo, en el diálogo sostenido por los dibujos entre la maestra y los niños se evidencian hallazgos y se busca la manera de hacer emerger, de hacer evidente, de hacer consciente, de compartir… lo que hasta ese momento sólo había estado presente como manipul…