Habitualmente, la incorporación de personas de diferentes razas a una misma aula genera entre el profesorado incertidumbre y desasosiego. Al desconocimiento de las peculiaridades más básicas de cada una de las culturas allí presentes, se une la preocupación por los problemas de convivencia que pudieran surgir y las dificultades propias de la adaptación del alumnado a las particularidades del modelo educativo que se adopta. Una situación que se enmarca en la natural inquietud que acompaña al reto.
Facilitar un objetivo nimio si no fuera por los problemas de intolerancia derivados de …