Como demuestran distintos estudios, la dieta alimenticia de los niños y niñas, en lo concerniente al desayuno, es bastante precaria: escaso, de poca calidad y, a veces, con excesiva premura o en un obsesivo contacto con la televisión.
Esta realidad, lejos de disminuir con el tiempo, parece, según los indicadores con los que contamos, que tiende a aumentar con la edad hasta llegar a asentarse como un hábito que afecta negativamente a nuestras vidas y salud.
Por ello pensamos que involucrar al alumnado en una experiencia que les permita alcanzar una mayor comprensión y conocimiento con re…